Para el frío, aroma de leña, hojas rojas
• El otoño invita a regresar a los pueblos y los bosques, un turismo mucho más rural.
16/11/09El cambio climático aún no nos ha privado de uno de los grandes privilegios para la vista humana: el otoño. Los bosques enrojecen, amarillean, están a un paso de desnudarse. La humedad ambiente crea aromas de madera mojada, profunda. Las pisadas sobre la alfombra de hojas caídas. En los pueblos se encienden las chimeneas y el olor a leña quemada en un hogar no puede dejar de reconfortar. Y la mejor forma de acercarse a este ambiente idílico es el turismo rural.
Se trata de una forma de conocer el país cada vez más extendida entre los españoles. Lo que sucede es que esto del turismo de pueblo ha evolucionado mucho. Y para bien.
También han dejado de usarse aquellas guías en forma de libro. La información en internet vuela y todo el mundo quiere tener su fin de semana idílico sobre seguro, sin sorpresas. Así es como surgen compañías como Top Rural (toprural.com). Se trata de un magnífico recopilador con 11.900 alojamientos en su catálogo, sólo en España (62.000 en toda Europa).
El turismo rural, tras unos años sin decantarse, dudosos, hoy día apuesta claramente por la calidad. Calidad de vida, gastronómica y de alojamiento en pueblos que merece la pena no perderse. Visitar la España rural no tiene que ser incómodo. Puede haber quien tenga miedo a que las vacas salten las cercas, a los perros, pero no hay excusa para no pasar una noche en una habitación de calidad, no necesariamente rústica, y sin duda es imperdonable no comer bien en el camino.
La temporada ofrece de todo en la mesa. Setas, caza, castañas, vino. Saborear las hogazas de pan de pueblo, por ejemplo, sin los aditamentos del plan precocinado que se lleva tan a menudo en las ciudades, es un placer.
La gama de precios va desde los 30 euros hasta las tarifas de gran lujo, que se pueden acercar a los 300. Hay para todos los bolsillos, para todos los gustos.
La página toprural.com se ofrece como el gran buscador para este tipo de alojamientos rurales. En ella se tiene acceso a fotos e información sobre precios y disponibilidad, así como el contacto directo con los hosteleros, que a veces tienen su propia web.
Ya no hay excusa para no disfrutar del otoño. Sin sorpresas, al alcance de un clic, elija minimalismo o rústico, pero huela esta maravillosa estación.
